Mirar, fotografiar un paisaje bello, es un poco como escuchar música o leer poesía, ayuda a vivir
Marc Riboud

viernes, 12 de diciembre de 2014

Dulce omnipresencia



¿Qué ser vivo, dotado de sentidos, no ama,
por encima de todas las maravillas del espacio que lo envuelve,
a la que todo lo alegra, la Luz
–con sus colores, sus rayos y sus ondas; su dulce omnipresencia–,
cuando ella es el alba que despunta?
 
Novalis